Necesidad de un cambio en las políticas forestales europeas, la gran reflexión de los expertos tras los terribles incendios forestales en Portugal
La ola de incendios que ha azotado Portugal ha dejado 7 fallecidos (cuatro bomberos y tres civiles), decenas de heridos, cientos de personas que han perdido su vivienda, carreteras cortadas, evacuaciones masivas, confinamientos… La ayuda internacional se ha puesto en marcha con diferentes medios y dispositivos humanos y estratégicos. España ha mandado al país vecino 230 bomberos de la Unidad Militar de Emergencias para ayudar en la lucha contra los 43 incendios simultáneos que se declararon.
En Albergaria-a-Velha, en el distrito de Aveiro, se registró una de las situaciones más peligrosas por la llegada del fuego a las casas. Con la población evacuada, más de 20 casas destruidas, decenas de heridos, el alcalde del municipio, António Loureiro, apeló a la “autoprotección de la población” ante la insuficiencia de medios para extinguir fuegos incontrolables y que se desaten con una gran violencia.
Las imágenes apocalípticas publicadas estos días en las zonas que se encontraban en el interfaz del incendio han desatado todas las alarmas y obligan a recapacitar y plantear soluciones valientes a los Gobiernos de la Unión Europea de manera unitaria.
En este sentido, los expertos de TECNIFUEGO, Asociación Española de Sociedades de Protección contra Incendios, instan a crear un plan europeo común basado en la gestión forestal que incluya inversión en las zonas rurales, concienciación del riesgo entre la población, ayuda en la implementación de los planes de autoprotección, aumento en la inversión en equipos y productos de lucha contra incendios; y aumento de los equipos humanos tanto los dedicados a la prevención como a la extinción, y una coordinación entre los cuerpos de lucha contra incendios a nivel europeo.
Las administraciones públicas tanto nacionales como europeas deben cambiar sus estrategias y plantear una gestión forestal en sus programas de lucha contra incendios. En este sentido, la inversión en la economía local y rural, para el desarrollo de actividades humanas que contribuyan a cuidar el entorno (pastoreo) y el aumento del material y del personal dedicado a la prevención (limpieza del monte en inviernos) y a la extinción durante la campaña de verano. Todas ellas son acciones claves y de responsabilidad política.
Fundamental es la concienciación del riesgo. Hay que ser consciente de que cualquier ciudadano puede padecer un incendio, y la preparación y las medidas que haya adoptado es básico para la defensa de sí mismo y de su entorno. Es lo que se denomina en protección y lucha contra incendios autoprotección. En la propia vivienda, municipio y entorno, los individuos y las comunidades deben adoptar unas mínimas medidas de protección.
Todas las viviendas y urbanizaciones deben de contar con un plan de autoprotección que contemple las medidas preventivas y de defensa frente a los incendios forestales. Este plan deberá redactarlo el titular o representante de las viviendas o urbanizaciones y presentarlo en el ayuntamiento correspondiente.
Gestión del territorio, clave contra los incendios. El número de grandes incendios forestales (GIF) baja, pero cada vez son de mayor tamaño y mayor intensidad. Llegándose a los fuegos que están fuera de capacidad de extinción implican el ataque indirecto al fuego. La nueva tipología de los incendios demanda una gestión del paisaje integral dando protagonismo a los aspectos preventivos.
En definitiva, para lograr una autoprotección adecuada, desde TECNIFUEGO recomendamos la gestión forestal o gestión del paisaje; inversión y ayuda para implementar los planes de autoprotección en municipios y urbanizaciones; la implementación de una protección integral en las viviendas cercanas a bosques, que incluya la protección pasiva en la edificación e integre reacción y resistencia al fuego; adoptar la jardinería preventiva, realizar la limpieza perimetral y las líneas cortafuegos, tanto en cada parcela como en la urbanización; asegurar la instalación de hidrantes en municipios y urbanizaciones; y dentro de las viviendas se deben instalar equipos y sistemas de prevención y extinción, como detectores, extintores, mantas ignífugas, BIES, rociadores, etcétera.
Para debatir y analizar sobre estos temas, TECNIFUEGO ha organizado la VI Jornada Técnica Lucha contra Incendios Forestales, el próximo 22 de octubre. En colaboración con el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico y las asociaciones de bomberos APTB y ASELF, la jornada es abierta previa inscripción en: https://www.tecnifuego.org/index.php/vi-jornada-tecnica-lucha-contra-incendios-forestales